En el Colegio Salesianos
Santísima Trinidad hemos podido disfrutar, por segunda vez este curso, de un día
diferente. Un colegio tan grande como los corazones de sus alumnos, con grandes
muros cargados de esperanza en el futuro. Un colegio que brinda la oportunidad de
aprender la realidad de la vida desde edades tempranas.
Un alumnado dispuesto a sentir, a
aceptar nuevos sentimientos y a ponerse en el lugar del otro. Un alumnado que
siente con otros ojos, que sabe que hay flores celestes, rosas y violetas y
peces naranjas, rojos y turquesas. Que sabe que hay quien habla con las manos o
quien "ve" con un bastón o quien no entiende de la misma manera lo
que otros entienden a la primera pero que siendo distintos, ya sean como sean,
todos queremos que muchos y muchas nos quieran.
Pilar y Rosario, unas profesoras
excelentes y comprometidas, nos han prestado toda su atención y han hecho
posible que sus alumnos puedan disfrutar
de este taller una vez más. Ilusión, entrega y mucho cariño es lo que se ha
podido sentir y vivir durante el desarrollo de éste. Todos lo hemos pasado
genial y hemos aprendido mucho de esta jornada tan divertida como
enriquecedora.
Agradecerles su colaboración,
disponibilidad y habernos brindado la oportunidad de compartir un rato estupendo en sus aulas.
